COMER, COMER QUE ES NAVIDAD.....

FELICHE NAVITATE, decia el monje, y Navitate feliche, la monja.

Ruta gastrocultural, para despedir el año, con la subida al Castillo, por el GR-7

y bajada por la calzada Romana, para terminar el la venta "LA CANTINA", donde comimos mu mal:

1º. entremeses varios

y ensalada

2º. Potaje de tagarnina o sopa picadillo

3º. Solomillo o bacalao.

4º. postre

5º cafe.

El club puso los rosquitos y los borrachones.

TOTA QUE COMIMOS FATAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAL, eso si de arcol na de na.

CUANDO LA BURRA LEVANTA EL RABO......

EMBLEMATICA RUTA POR LA TROCHA.

Nuestro amigo Paco Cabrera, no hizo disfrutar de lo lindo.

Ademas tuve la grata sorpresa, de que nos acompañaran, Marifeli y Maribel, amigas del Club de Chiclana, y con las que volvimos a pasar un dia entrañable - GENTE GUENA--.

Menos mal que el amigo paco, tuvo cena de navidad y el dia anterior y ademas triunfo esa noche, esto hizo que la ruta fuera mas suave y explicativa. Decia el amigo paco: "Cuando la burra levanta el rabo.......", entre otras.

En la ruta pudimos ver cantidad de setas, alguna que otra T y un par de V. Y en definitiva, una gran ruta al alcance de cualquiera del club, sin ningun tipo de problema. La rubia, la encontre al final, junto con algun que otro montadillo y fritura variada --higado con tocino--.....

PASEO REAL

DIFERENCIA HORARIA.

Fue paseo, de cuatro horas. Fue real, por el lugar. Y fue inedito, pues nunca habiamos explorado esa parte de la montaña. No habia naide, no habia viento, ho habia agua, no habia rubia pero para Nuestro asombro si estuvo el rubio y su calentita. SALUDOS PA "RA"........

!NO QUERIAS AGUA!: POS TOMA DOS TAZAS

JIMENA -29-11-2009.

Gracias Eolo, pero vamos que apretaste bien con tus brazos, porque en siete horas que duro la rutita no paro de cae y de cae hasta no mas poder.
Lo que se pensaba como media, llego a ser alta, y muy alta para algunos, aunque merecio la pena.
Solo fueron 18km, pero contaron como muchos mas.
No pudimos ni sentarnos para degustar los alimentos que cada cual portaba, porque las inclemencias meteorologicas no nos lo permitieron, aunque algun que otro trago cayo,a lo largo del camino.
El paisaje, incluso con la lluvia, con unos colores y olores varios, y sobre todo el silencio y la paz que se respiraba, algo solo entendible para aquellos nostalgicos de tiempos pasados.
La senda, a veces seca y a veces embarrada, un deleite, donde se pudieron degustar algun que otro madroño y alguna que otra bellota, con un sabor muy bueno. No obstante no tanto como el sabor de los productos degustados en "CASA CUENCA", productos todos bajos en colesterol y sal, muy aconsejables para cuerpos ligeros y correosos, aunque lo mejor LA RUBIA, que manera, que formas, que pico, un pico de oro..........